Podemos decir que se denomina “Automantenimiento” a la actividad de Mantenimiento que consigue que todos los operarios de Fabricación asuman tareas de Mantenimiento basadas en pequeños ajustes, inspecciones visuales, limpieza, pruebas funcionales, propuesta e implantación de mejoras, así como tareas de mantenimiento preventivo, predictivo y correctivo.

El Automantenimiento o TPM (Total Productive Maintenance) es una filosofía originaria de Japón, la cual se enfoca en la eliminación de pérdidas asociadas con paros, calidad y costes en los procesos de producción industrial.

Con él se pretende pasar del “Yo opero, tu reparas”, al “Yo soy responsable de mi equipo”.

En contra del enfoque tradicional del mantenimiento, en el que unas personas se encargan de “producir” y otras de “reparar” cuando hay averías, el Automantenimiento aboga por la implicación continua de toda la plantilla en el cuidado, limpieza y mantenimiento, logrando de esta forma que no lleguen a producirse averías, accidentes o defectos.

Con este nuevo enfoque tenemos que el mantenimiento de los equipos es una de las grandes funciones de producción, por ello a los operarios de fabricación se les debe exigir mayor implicación en vigilar y mantener sus equipos, inicialmente a un nivel más elemental para ir asumiendo progresivamente más responsabilidades.

En innumerables industrias se han puesto de manifiesto que numerosos fallos se evitarían si los equipos gozan de una atención particular por parte de los operarios de fabricación.

Para su aplicación se requiere una evolución profunda en la organización y en sus comportamientos y prácticas ya que se necesitará:

  1. Medir para reducir o eliminar todo tipo de pérdidas de eficacia del sistema de producción, tales como:
    • Averías
    • Desviaciones de tiempos de ciclo
    • Preparaciones y reglajes
    • Cambios de útiles, herramientas, etc.
    • Problemas de calidad (recuperaciones, retoques, etc.)
    • Pequeñas paradas y bajo rendimiento en las puestas en marcha de los equipos.
  2. Un Plan de Mantenimiento Preventivo con tareas e inspecciones cotidianas que el operario va a ejecutar para mantener sus equipos en condiciones óptimas de funcionamiento.
  3. Lograr que el operario de Fabricación identifique anomalías, las resuelva, proponga mejoras para eliminarlas, además de aportar ideas para establecer nuevos estándares.

Nunca se debe caer en la trampa de que el Automantenimiento es un simple traspaso de la actividad de Mantenimiento a la Fabricación, o de que es una oportunidad de atribuir la limpieza de los talleres a los operarios de fabricación, sino que se debe preparar muy cuidadosamente para no fracasar.

El Automantenimiento se orienta a crear un sistema corporativo que maximiza la eficiencia de todo el sistema productivo, estableciendo un sistema que previene las pérdidas en todas las operaciones de la empresa. Esto incluye “cero accidentes, cero defectos y cero accidentes” en todo el ciclo de vida del sistema productivo.

Se apoya en la participación de todos los integrantes de la empresa, desde la alta dirección hasta los niveles operativos. La obtención de cero pérdidas se logra a través de trabajo de pequeños equipos.

El Automantenimiento permite diferenciar una organización en relación a su competencia debido al impacto en la reducción de los costos, mejora de los tiempos de respuesta, fiabilidad de suministros, el conocimiento que poseen las personas y la calidad de los productos y servicios finales.

El Automantenimiento busca:

  • Maximizar la eficacia del equipo
  • Desarrollar un sistema de mantenimiento productivo por toda la vida del equipo
  • Involucrar de forma activa a todos los empleados de la empresa
  • Promover el Automantenimiento a través de motivación con actividades autónomas de pequeños grupos
  • Cero accidentes
  • Cero defectos
  • Cero averías

Esperamos que este post os haya sido de utilidad y os anime a introducir prácticas de Automantenimiento en vuestras empresas y organizaciones.